EL MG. SALINAS NOS INVITA A REFLEXIONAR RESPECTO A UN PADRE QUE ES MAESTRO:
En mi casa saludar a mi padre hoy día era una costumbre. Él, maestro toda su vida, fue un ejemplo vivo de lo que significaba ser profesor en el Perú.
De joven recorrió casi todo el país educando, ya viejo su preocupación residía siempre en los maestros más jóvenes. Su afán por enseñar a veces se enfrentaba a la apatía y desgano de quien escribe esto. Sin embargo, el nunca cesó de sacar todos sus libros cuando le hacía una pregunta. Ahora recién entiendo lo que hacía.
Lo recuerdo muy de tarde tecleando su máquina de escribir o muy temprano siempre impecable para ir al trabajo. Seguramente si él siguiera vivo ya lo habría llamado para saludarlo en su día. Quizá hubiéramos conversado un poco sobre el ser maestro en el Perú, quizá hubiera preparado un texto. Y de todas maneras hubieramos renegado que en ningún lado diga nada sobre el día del Maestro.
En un país como el nuestro en el que el ser maestro suena a tan poca cosa [ausencia de remuneración y reconocimiento justo] se necesita revalorar la profesión docente. No solo son noticia cuando se van de huelga. Hay miles de maestros, como mi padre, que trabajan con la única consigna de educar, porque en ellos habita la vocación. Y eso también es noticia. Feliz Día del Maestro, Papá.
MG. ORLANDO SALINAS LÓPEZ
En mi casa saludar a mi padre hoy día era una costumbre. Él, maestro toda su vida, fue un ejemplo vivo de lo que significaba ser profesor en el Perú.
De joven recorrió casi todo el país educando, ya viejo su preocupación residía siempre en los maestros más jóvenes. Su afán por enseñar a veces se enfrentaba a la apatía y desgano de quien escribe esto. Sin embargo, el nunca cesó de sacar todos sus libros cuando le hacía una pregunta. Ahora recién entiendo lo que hacía.
Lo recuerdo muy de tarde tecleando su máquina de escribir o muy temprano siempre impecable para ir al trabajo. Seguramente si él siguiera vivo ya lo habría llamado para saludarlo en su día. Quizá hubiéramos conversado un poco sobre el ser maestro en el Perú, quizá hubiera preparado un texto. Y de todas maneras hubieramos renegado que en ningún lado diga nada sobre el día del Maestro.
En un país como el nuestro en el que el ser maestro suena a tan poca cosa [ausencia de remuneración y reconocimiento justo] se necesita revalorar la profesión docente. No solo son noticia cuando se van de huelga. Hay miles de maestros, como mi padre, que trabajan con la única consigna de educar, porque en ellos habita la vocación. Y eso también es noticia. Feliz Día del Maestro, Papá.
MG. ORLANDO SALINAS LÓPEZ